14 de octubre de 2010

Usera: Un poco de historia

El distrito de Usera está organizado administrativamente en los barrios de Orcasitas, Orcasur, San Fermín, Almendrales, Moscardó, Zofio y Pradolongo. Es difícil encontrar en la red información sobre el origen de la colonia Moscardó.
En 1908 Marcelo Usera contrajo matrimonio con Carmen del Río Fernández, hija de un rico terrateniente de Villaverde que poseía muchas tierras en la zona sur de Madrid. Parte
de esas tierras fueron la dote que Carmen aportó al enlace. Antes de que comenzase la década de los años 20, Marcelo Usera compró y cambió propiedades de la zona para centralizar los terrenos. En aquellos tiempos sólo existían en la zona algunas edificaciones aisladas, caminos y el trazado del ferrocarril de San Martín de Valdeiglesias-Villaviciosa de Odón.
Marcelo Usera encargó a su administrador, Felipe Díaz, la parcelación de los terrenos y el trazado de muchas de las actuales calles del barrio. Esta labor se inició en 1921 en la zona más próxima al río, punto del que arrancaban la calle Marcelo Usera y otras dos paralelas, las actuales calles de Antonio Salvador y Amparo Usera.
En 1930 ya se habían instalado en la zona medio centenar de familias procedentes sobre todo de
las provincias de Madrid, Cuenca y Guadalajara. El primer núcleo del barrio lo formaban trescientas parcelas que Marcelo Usera bautizó con el nombre la Legión. En aquella época las normas municipales permitían elegir a los ciudadanos la denominación de nuevas calles, siempre que éstas no existieran ya en el callejero y es esta la razón de que muchas calles del barrio lleven el nombre de familiares directos o políticos de Marcelo Usera, de sus empleados,
e incluso de algunos amigos.

2 de octubre de 2010

Será por razones

Cuando decidimos independizarnos solemos buscar un piso compartido, bien en el barrio donde nos hemos criado, bien en el centro de la ciudad. En nuestro caso (en el de las dos) la situación económica de nuestros progrenitores es muy superior a las nuestras y la mayoría de nuestros amigos se han ido diseminando por la geografía madrileña. Es agradable conocer el entorno, las tiendas, el transporte y la zona a la que vas a mudarte para no sentirte solo en un ambiente extraño y desarraigado. Así que nos mudamos o mudaremos (Ester va de cabecilla, reconociendo el terreno) al barrio donde creció mi madre: Usera.
Guardo muchos recuerdos de mi infancia agarrada a las faldas marrones de mi abuela por sus calles. El camino al colegio a recoger a mi tía, la pastelería donde comprábamos las tartas de cumpleaños y los roscones de Reyes (ya le dedicaré una entrada a este establecimiento), la panadería que hace esquina con Manuel Noya, el mercado y los olores,... Todo es viejo y nuevo a la vez porque Carabanchel, y más concretamente Usera, y todavía más estrechamente la colonia Moscardó, ha cambiado mucho desde que mis pequeñas piernecitas perseguían los pies de mi abuela en sus tareas diarias. Y si vuelvo, en parte es por esa seguridad que me transmitía tomar su mano sin importarme la dirección, porque todo es como una fotografía en blanco y negro a la que le han ido añadiendo elementos a todo color. Por otra parte la decisión de Ester de vivir en el barrio me ha dado el empujón que necesitaba para acelerar (aunque esto de la independencia es un proceso lento, en mi caso muy lento) la compra de mi primera (y seguro que última) vivienda.